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Dar el último adiós a un ser querido es un evento que conlleva una carga emocional muy pesada para los amigos y familiares del difunto, por ello, cada vez son más las herramientas que tenemos a nuestro alcance para disminuir el peso de una carga que puede afectar a todas las áreas de nuestra vida.
A fin de que este último adiós resulte más llevadero y nos permita desprendernos de la mayor cantidad de emociones posibles, desde Grupo Albia hemos creado las salas inmersivas, presentes en el Tanatorio de Jerez y el Tanatorio-Crematorio de A Coruña.
Sala inmersiva ¿Qué es?
La sala inmersiva es un espacio creado para las familias, donde a través de un complejo y moderno sistema audiovisual, se proyectan estímulos audiovisuales con la temática elegida por la familia: montaña, mar, naturaleza o universo.
Esto permite a los familiares y amigos del fallecido sumergirse en una delicada atmósfera mediante estímulos sensoriales envolventes, que han sido diseñados para facilitar el bienestar psicológico y emocional a la hora de dar el último adiós a un ser querido.
¿Cómo funciona una sala inmersiva?
La sala inmersiva es un espacio físico destinado a velar al fallecido de forma diferente. Mediante proyectores de alta resolución y altavoces surround se crea una atmósfera muy similar a la que sentiríamos si realmente estuviéramos en el lugar deseado, por ejemplo en el mar o la montaña.
Gracias a esta visualización de imágenes y sonidos se relajan todos nuestros sentidos, y se liberan de forma controlada y calmada gran parte de las emociones que acompañan a la pérdida.
Debemos tener en cuenta que el objetivo principal de la sala inmersiva es ayudar a mitigar el dolor en la medida de lo posible, facilitando así la gestión emocional en las primeras fases del duelo.
Tanatorios y salas inmersivas ¿Por qué esta combinación?
Actualmente, las salas inmersivas en tanatorios son un servicio exclusivo del Tanatorio Jerez y el Tanatorio-Crematorio A Coruña, ambos pertenecientes al Grupo Albia, dedicado a la organización y gestión de servicios funerarios desde hace más de 30 años.
La iniciativa de incluir salas inmersivas en los tanatorios nace del deseo de esta empresa de ofrecer servicios funerarios a las familias cada día más completos, dejando atrás la imagen de la funeraria que solo se encarga de organizar el funeral para acercarnos a un concepto más humano, transformado las funerarias y tanatorios en lugares comprometidos con las familias y el bienestar emocional de todos sus miembros, un bienestar que en demasiadas ocasiones se tambalea en exceso cuando se produce una pérdida.
Asimismo, la sala inmersiva permite a los familiares dar una despedida lo más personalizada posible, pudiendo elegir el escenario que más le hubiera gustado a esa persona tan importante para nosotros que acaba de fallecer. Pues, si por ejemplo la persona fallecida amaba el espacio, nada más bonito que despedirle en una sala inmersiva que nos haga sentir como si estuviéramos surcando el cosmos.